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Entrevista a Ramón Jimenez Gaona, exalumno de la promoción de 1987
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Ramón Jiménez Gaona comenzó su recorrido deportivo a los 14 años. Empezó practicando atletismo, en aquel entonces, para unas olimpiadas internas del colegio. Luego de probar diferentes disciplinas, terminó optando por disco y bala. En esta entrevista, nos cuenta cómo, desde entonces, fue enriqueciendo su trayectoria con competencias y distinciones.
¿Puede hablarnos de su carrera deportiva?
Mi prueba principal fue el lanzamiento de disco, con el cual tuve una conexión casi inmediata. A los 15 años, con 2 meses de práctica, bajo la tutela del gran profesor William Rivarola, batí el récord nacional de la categoría menores de 16 años. A los 6 meses de práctica, batí el récord sudamericano, un 7 de setiembre de 1985, en el campeonato intercolegial nacional organizado por el Ministerio de Educación. Fue el primer récord sudamericano de atletismo logrado por un paraguayo o paraguaya en cualquier categoría. Continué mi carrera para batir 10 récords sudamericanos en menores, juvenil y mayores. Fui campeón sudamericano en 5 ocasiones incluyendo los juegos olímpicos sudamericanos (ODESUR). Fui campeón iberoamericano de mayores y 3 veces olímpico.
Ud. participó en distintas oportunidades de Juegos Olímpicos, como representante de Paraguay. ¿Qué puede contarnos de esta experiencia?
Participé de 3 juegos olímpicos. En Seúl, Corea, en 1988, en carácter de invitado. En Barcelona, España, en 1992 y en Atlanta, USA, en 1996, habiendo hecho la marca olímpica. La experiencia de compartir dos semanas en la villa olímpica con los mejores deportistas del planeta es muy difícil de describir. Ver junta a tanta gente que uno admira, no tiene igual. Llegando al evento, clasificado entre los 10 mejores del mundo, en Barcelona (1992) tuve la mejor oportunidad de pasar a la final y disputar las medallas. Pero, como en todas las cosas, la suerte también juega su carta; una mañana lluviosa – que no se repitió para el segundo grupo de clasificación que participó a la tarde – me dejó a unos pocos centímetros de pasar a la final. La marca que había logrado un mes antes, para hacer el récord sudamericano, era suficiente para subir al podio olímpico, de haberlo podido repetirla en la final.
¿Cuál fue el momento más importante, durante su trayectoria como atleta?
Como lanzador de disco, fue la medalla de oro del campeonato Iberoamericano de categoría mayores logrado en Mar del Plata, ganando en la final al cubano Luis Mariano Delis, excampeón mundial de la prueba. Hasta hoy día, la única medalla de oro para Paraguay a ese nivel internacional. Como deportista paraguayo, fue al llevar la bandera nacional en la inauguración de las 3 olimpiadas que participé y el llevar la antorcha olímpica en uno de los últimos tramos camino al estadio en Seúl, Corea, en 1988, en la apertura de los juegos olímpicos.
¿Cree que hay suficiente u óptima formación e impulso deportivo en los colegios?
Si bien estoy alejado del deporte a nivel de colegios desde hace bastante tiempo, y no veo más allá de los intercolegiales de mis hijos, creo que el deporte a nivel de colegios no evoluciona de manera tal que permita ser un semillero de deportistas olímpicos o profesionales. Me gustaría ver al Ministerio de Educación, la Secretaría de Deportes y al comité olímpico paraguayo en un rol más proactivo para crear oportunidades de desarrollo de nuestros jóvenes por medio del deporte con becas, mejor infraestructura, capacitación a entrenadores y torneos nacionales.
¿De qué manera cree que se podría apoyar la formación y el desempeño de los jóvenes, en carrera deportiva de estos?
Entiendo que se puede hacer muchísimo más por promover los deportes, como una herramienta para enseñar a nuestros hijos valores y principios de una manera divertida. Con el deporte se puede enseñar a ganar y perder, respetar a nuestros compañeros y los rivales, seguir las reglas y trabajar con disciplina, orden y planificación. Es una gran escuela de valores y principios que bien pueden servir para promover una sociedad mejor.
«El deporte en el colegio San José, no solo el atletismo, me dejó muy buenos amigos de numerosas promociones»
¿Algo que añadir?
El deporte en el colegio San José, no solo el atletismo, me dejó muy buenos amigos de numerosas promociones, muchos de los cuales hasta hoy día tengo la suerte de poder ver y compartir. Me gustaría que los alumnos del colegio hoy tengan la suerte que tuvimos nosotros de compartir tanto por medio del deporte.
