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La Ruta de la Caña en Paraguay es mucho más que un recorrido turístico; es una travesía cultural, histórica y sensorial que lleva a los visitantes al corazón de una de las bebidas más emblemáticas del país: la caña paraguaya.
A través de un viaje que abarca distintas localidades, principalmente en el departamento de Paraguarí, los turistas pueden experimentar el auténtico proceso de destilación artesanal y descubrir las leyendas e historias que acompañan a este producto tan arraigado en la cultura paraguaya.
Historia de la caña en Paraguay
La historia de la caña paraguaya se remonta a la época colonial, cuando los colonos españoles introdujeron el cultivo de caña de azúcar, inicialmente destinada a la producción de azúcar. Con el tiempo, la caña empezó a utilizarse para la elaboración de bebidas alcohólicas, y así nació lo que hoy conocemos como caña paraguaya o caña blanca. Este producto ha sido parte de la vida paraguaya durante generaciones, consolidándose como una actividad económica importante, especialmente en el departamento de Paraguarí, gracias al clima subtropical y tierras fértiles de la región.
La caña paraguaya, más que una bebida, está profundamente entrelazada con nuestras costumbres y reflejan la rica herencia cultural de Paraguay.
El proceso artesanal: desde la caña de azúcar hasta la caña paraguaya
Una de las principales atracciones de la Ruta de la Caña es el recorrido por fábricas y destilerías que mantienen métodos de producción tradicionales. Los visitantes observan el proceso completo: desde la cosecha manual en los cañaverales hasta la transformación de la caña en una bebida espirituosa. Aquí, el jugo de caña o guarapo se fermenta y destila en alambiques de cobre, donde se obtiene una bebida de gran pureza e intensidad. Este proceso artesanal permite a los turistas conocer en detalle cada etapa y, por supuesto, probar la caña recién producida.
Cultura y tradiciones en torno a la caña
La caña paraguaya no es solo una bebida; está entrelazada con costumbres y festividades, especialmente en San Juan Ára, una celebración de junio donde la caña ocupa un lugar especial. Una de las tradiciones más conocidas es la caña con ruda, consumida cada 1 de agosto como una forma de protegerse contra enfermedades y malos espíritus, en un ritual que mezcla influencias guaraníes y europeas.
En Piribebuy, conocida como la ‘capital de la caña’, los visitantes pueden explorar destilerías históricas y degustar la bebida, mientras se sumergen en la herencia cultural de la región.
Impacto económico y turismo en crecimiento
La producción de caña representa una fuente de ingresos vital para pequeños y medianos productores, especialmente con el reciente auge del turismo gastronómico. La Ruta de la Caña ha atraído a turistas nacionales e internacionales que buscan experiencias auténticas y de conexión cultural. Con el interés en el turismo enológico y de destilerías, esta ruta se ha convertido en una oportunidad para explorar la vida rural de Paraguay y descubrir las raíces de una bebida que, más que alcohol, lleva consigo el espíritu y tradición del país.
Una experiencia que fusiona historia y sabor
La Ruta de la Caña se concluye con una celebración paraguaya, donde los visitantes disfrutan de música en vivo, danzas folclóricas y una barra libre de cocteles a base de caña Fortín.
Cocteles como el Mojito Guaraní y el Takuare’é Roke se mezclan con la sopa paraguaya y el pastel mandi’o para cerrar la experiencia. Este recorrido permite a los visitantes vivir la historia, disfrutar de los sabores y celebrar la cultura paraguaya en una experiencia única, llena de tradición, sabor y autenticidad.