Un deporte para todos

Entrevista a César Abente, exalumno promo 1986

El rugby podría ser uno de los deportes más democráticos que existe: uno puede ser alto, bajo, grueso, delgado… y tiene un lugar en el equipo.

Según César Abente, fue esto – el hecho de que cualquiera puede jugar rugby – lo que le llevó a dar sus primeros pasos como rugbier.

¿Nos cuenta cómo se inició en el rugby?

Corría el año 1982 y venia jugando básquet en el colegio, y por el Deportivo en Mini Básquet desde los 8 o 9 años, por ahí.

Cuando estaba en 2° curso, los profesores eran Bambi Lezcano y Yiyo Salinas. Fue entonces cuando yo le encaré al profesor Salinas: “profe, no me están poniendo más en el equipo…”. Me respondió: “Abenteeeee, estás muy enano ¡estirate, mirales a tus compañeros!”. Estos eran nada más que Lalo Heisecke, Jose Fuster, Vicente Fromherz, Robert Santacruz… ¡todos me sacaban una cabeza por lo menos! ¡Y veníamos de épocas doradas con Ochipinti y compañía!

Entonces, como veía negra la situación, un día fueron al aula Kike Bareiro, Santiago Quevedo, Enri Riera y otros más a invitar “a jugar rugby, un deporte para todos; altos, bajos feos, lindos, gordos, flacos”, según ellos.

Me metí en 6ª división (hoy M14). Mis entrenadores fueron José Matiauda (exalumno) y el Negro Denis (del Goethe, pero sanjosiano a muerte). Recuerdo que en mi primer entrenamiento hice un tackle practicando, y el Negro Denis deliró porque no tuve ninguna reserva en los movimientos para poner el hombro y detener al compañero. Claro, venía de ser basquetbolista y atleta por el colegio. Pero me dediqué al rugby.

¿Qué momentos de su trayectoria considera que fueron los más importantes?

Muchos momentos: viajamos a jugar a Salta, Goya (Corrientes), Santiago del Estero (selección paraguaya), Buenos Aires (por el colegio, en el torneo betharramita de 1985), Montevideo, etc.  ¡Qué mucho nos divertimos jugando, viajando, ganando… y, a veces, perdiendo!

De Goya trajimos amigos como Salvador Gortari, que luego vino a vivir a Paraguay (falleció más tarde en un accidente de avión). Hasta fuimos a jugar contra Desterro Rugby Club en Florianópolis. Y, en el 2017, fuimos a Sudáfrica en una gira fabulosa de 2 semanas por las mejores tierras y estadios de rugby del mundo.  

Viajes inolvidables, imborrables a la mente. No hubo un momento; todos los años que transcurrieron fueron importantes. Salimos campeones en 6ta, 5ta y 4ta división y Juvenil, siempre contra el Curda, y algunos años versus el Asunción Rugby Club.

¿Hubo partidos o campeonatos que recuerde con mayor cariño?

Sí, obviamente: la final de 1991 vs. Curda, en el Curda. Salimos campeones y tuvimos una racha de 7 campeonatos consecutivos. Fue la mejor época del San José Rugby Club. Tuve la suerte de jugar esa final, y formar parte del plantel superior. ¡Equipazo!

Jugamos partidos en lugares increíbles, en Salta con la precordillere de fondo, en el año 1984. O Cape Town, en el 2017, con los chicos de la primera, M18 y M16. 

Actualmente, ¿cuál es su relación con el rugby y/o el San José Rugby?

Sigo en el club como socio activo y familiar, mis hijos juegan y se divierten. ¡El club creció de una manera fantástica!

Todos están invitados, cuando quieran, a quedarse a tomar algo en la cantina, compartir partidos y charlas con amigos de todas las edades. Lo más lindo del rugby es la amistad y los momentos. La vida está hecha de momentos.

Hoy, esta es mi posición. Quizás mañana ayude, de acuerdo a mi tiempo y capacidad de compromiso.

Lo más lindo del rugby es la amistad y los momentos. La vida está hecha de momentos.

¿Qué espera del rugby en nuestro país y en el San José Rugby?

Del San José Rugby Club espero que siga en la senda del crecimiento de la familia; institucional y deportivamente estamos transitando el crecimiento y el desarrollo de los jugadores en técnica y destrezas. Esta pandemia nos vino a cortar a todos las patas, pero ya retomaremos los trabajos de los entrenamientos, partidos y torneos.

En cuanto al rugby de la Unión o URP, ahora estamos bajo el mandato de Gustavo Borgognon, exjugador y expresidente del San José Rugby Club, y tenemos todas las esperanzas de que podremos salir del pozo en que nos encontramos a nivel regional. Pero necesitamos apoyar y ayudar y, más que nada, fomentar a los actuales jugadores nacionales y del club a poner los mayores esfuerzos y compromisos como deportistas.

¿Algún mensaje que le gustaría transmitir a los rugbiers de la familia sanjosiana?

Hay muchas maneras de vivir la vida, la mejor de todas es vivir manteniendo la familia y la amistad en su máxima expresión. ¡No desaprovechen nunca! Como dice Jorge Drexler, “que todo tiempo pasado es peor, no hay tiempo perdido peor, que el perdido en añorar”, ¡todo lo que vamos a hacer es mucho mejor que lo que hicimos ayer!