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“Educar no es sinónimo de depositar conocimientos en nuestros educandos. Pensar así es muy limitado, ya que el mundo de hoy nos exige colaborar en la formación de buenas personas”, afirma Aidil Notario, profesora del San José y presidenta de la ASOP San José.
Desde la asociación, los docentes miembros de la misma se forman para instruir de manera integral. “Es nuestra responsabilidad inmediata como educadores la formación continua”, explica la profesora Aidil, al referirse a algunas de las metas de la ASOP San José.
¿Cuáles son los objetivos actuales de la asociación?
La ASOP San José tiene como fin primordial constituirse en un equipo de educadores católicos que colaboren estrechamente con el Consejo Directivo y los demás estamentos de la Comunidad Educativa del Colegio de San José, para brindar la mejor formación a niños, niñas y jóvenes de la Institución.
Nuestra labor se basa en la espiritualidad de la Congregación Betharramita, fundada por San Miguel Garicoïts: Fiat Voluntas Dei (“Hágase la voluntad de Dios”); Ecce Venio (“Aquí estoy”); comprometidos con la educación integral de nuestros estudiantes; con Amor y por Amor.
¿Qué tipo de actividades o trabajos tienen lugar desde la asociación?
Como estamento representante del cuerpo docente de la institución, nos ponemos al servicio de nuestros asociados y de todos los colegas para integrar a los nuevos compañeros a la Comunidad Educativa.
Organizamos y realizamos actividades que fomenten el sentido de pertenencia y la participación activa en la ASOP y, al mismo tiempo, ayuden a estrechar vínculos de conocimiento, amistad y solidaridad entre todos los compañeros. Espacios que favorecen un ambiente de camaradería y bienestar en el ejercicio de nuestra labor.
También buscamos canalizar inquietudes, defender derechos e intereses de los colegas – recurriendo a las instancias correspondientes – para actuar como mediadores, entablar lazos de unión y colaboración con organizaciones gremiales u otras asociaciones de igual carácter.
Por otro lado, estamos a disposición de las autoridades institucionales, como órgano de consulta, cuando por razones de competencia y especialidad se requiera.
¿Cuáles son algunos desafíos que observan en la actualidad?
Uno de los desafíos más grandes para nuestra asociación es lograr una mayor integración entre los miembros del plantel docente. Vemos necesario propiciar espacios que permitan a los compañeros conocer la finalidad de la ASOP, así como fomentar la cohesión y participación de todos los docentes del colegio de San José.
Asumir como propios – y compartir con los compañeros – los lineamientos que deben regir nuestra práctica, en la labor como docentes católicos y betharramitas.
Consideramos que los docentes debemos ser escuchados y tenidos en cuenta, a la hora de toma de decisiones que afecten nuestro desempeño académico. Está comprobado que en la educación, el trabajo colaborativo y mancomunado arroja resultados mucho mejores en la formación de niños y jóvenes.
Como lo expresa la educadora chilena, Daniza Vivanco: “Considerar a los maestros debería ser un imperativo cuando se proponen las políticas de calidad educativas. Nosotros, que estamos en las aulas con los estudiantes, tenemos mucho que aportar. Sabemos cómo son, cómo aprenden, conocemos su contexto, qué precisan de la educación formal”.
¿Y de qué manera cree que se podría responder a esto?
Es nuestra responsabilidad inmediata como educadores la formación continua. Por ello, figura como prioridad en nuestra agenda plantear proyectos que nos permitan acceder a capacitaciones y actualizaciones, a corto, mediano y largo plazo.
De esta manera, buscamos estar al día para proveer a nuestros alumnos los saberes innovadores que merecen y necesitan y para enfrentar los desafíos cada vez más variados y exigentes de una sociedad dinámica y en constante cambio.
Estamos convencidos de que solo en un clima de tolerancia, apertura al diálogo y escucha democrática, se consigue la cohesión necesaria entre los estamentos del colegio, que genere crecimiento y redunde en beneficio de todos.
Estamos abocados a promover, en la medida de las posibilidades actuales, espacios de encuentro, que generen confianza entre los miembros de la asociación; y de estos, con el resto de la Comunidad Educativa.
Como asociación, ¿qué metas les gustaría alcanzar?
Tenemos la esperanza de fortalecer los lazos de compañerismo y amistad entre todos los docentes de la Institución, sumando cada vez más socios a la ASOP, teniendo en cuenta nuestro lema “todos somos uno”. Este expresa el deseo de unidad, que resulte en una mayor fuerza de acción.
¿Algo que quiera añadir?
Como es sabido, esta pandemia trajo consigo nuevas formas de impartir clases (entre muchos otros cambios) que han modificado, en muchos aspectos, nuestro rol docente.
Ha exigido, en muchos casos, un “reaprendizaje” de estrategias y métodos pedagógicos. Con aciertos y errores, vamos saliendo adelante. Desde esa perspectiva, sentimos la responsabilidad de empatizar con nuestros compañeros, y apoyarlos en la medida de nuestras posibilidades.
¿Qué mensaje le gustaría transmitir a otros profesores y a las familias del colegio San José?
Es importante que todos los que integramos la comunidad educativa de nuestro querido Colegio de San José comprendamos que educar no es sinónimo de depositar conocimientos en nuestros educandos. Pensar así es muy limitado.
El mundo de hoy nos exige colaborar en la formación de buenas personas; responsables, maduras, con espíritu crítico, solidarias, honestas, respetuosas del entorno que las rodea.
Personas que comprendan y valoren su realidad y la del “otro”. Y que – poniendo en práctica los valores betharramitas asimilados durante su vida escolar – asuman, desde el rol que les corresponda desempeñar como individuos, ciudadanos, profesionales, padres de familia, cristianos, etc., el compromiso de ser agentes de cambios positivos, para forjar un Paraguay mejor. Para ellos mismos y para las siguientes generaciones.
Una frase de nuestro santo fundador, San Miguel Garicoïts, que nos desafía en la vocación que abrazamos es: “Educar es obra de amor. Es formar al hombre y ponerlo en condiciones de brindar a los demás una profesión útil y honorable y prepararlo para la vida eterna, elevando la vida presente”