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Promoción 1974
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Los amigos, las travesuras, aquel profesor que inspiraba con sus clases, aquella maestra que mantenía a todos en línea, pero que instaló la disciplina a fuego en sus alumnos, etc. Unos integrantes de la promoción de 1974 del San José decidieron rememorar esos momentos reuniéndose e inmortalizando su encuentro en una foto.
A medida que pasan los años los recuerdos de aquellos tiempos inocentes de colegio se van volviendo cada vez más invaluables.
La filosofía de los exa sanjo es que aquel compañero que se adelantó continúa estando y formando parte del grupo.
Ricardo Moreno (+)
Al primero de los exalumnos que recuerdan es a Ricardo Moreno, fallecido el 4 de setiembre del año 2010. Sus compañeros consideran que, a pesar de no poder formar físicamente parte de la reunión, este aun así está presente en ella, tanto que su imagen se incluye en la foto grupal. La filosofía de los exa sanjo es que aquel compañero que se adelantó continúa estando y formando parte del grupo.
Teniamos grandes profesores que eran importantes personalidades en sus materias
Mario Coscia
Mario Coscia: En nuestra época de estudiantes teníamos grandes profesores que realmente eran grandes personalidades en su materia, aparte de ser referentes del ámbito social y profesional del país. Estos influyeron positivamente en nuestra formación personal, ya que aparte de dictar sus clases magistrales nos formaban en valores como solidaridad, compañerismo etc., que hasta hoy tenemos presentes en nuestra actividad profesional.
Nuestra promoción 74 confirma lo que mencioné en referencia a los valores, estamos en contacto todos los días por las redes sociales y mediante esta herramienta ya hemos realizado varios aportes solidarios para compañeros y otros que necesitaron ayuda. Anécdotas hay muchísimas, sería imposible resumirlas todas, una que recuerdo es que ya en sexto curso, nuestro último año, -tantas cosas hacíamos dentro del aula-, que en una oportunidad nos percatamos de que el Pa’i Villamor, a quién le decíamos Kennedy por el parecido, se escondía para vigilarnos.
Había una ventanita arriba, en la esquina del aula, tenía un tejido y desde ahí nos controlaba, luego bajaba rápidamente y entraba al aula, pero estaba impecable y no podía perseguirnos con el famoso “conducta y disciplina”. Otra anécdota: hacía mucho frío y las puertas del aula cerradas, estábamos en clase de religión, de repente, un golpe fuertísimo en la puerta. El Pa’i, hoy Monseñor, la entreabre y este dice “¿Qué pasa pendejo? ¿quiere que lo muela a patadas?” La palabra no era muela precisamente y el “pendejo” era Joaquín Paco Amarilla.
Tuvimos el privilegio de contar con una educación de primera calidad
Roque Terreonoire
Roque Terreonoire: Otro integrante de la promoción, el señor Roque Terrenoire, debido a que se encuentra radicado en EEUU, no pudo participar de la reunión de la promoción. No obstante, gracias a la tecnología tuvimos la posibilidad de obtener sus opiniones acerca de sus tiempos de estudiante y sus recuerdos.
Manifestó que lo más importante que le dio el “Sanjo” fue el privilegio de contar con una educación de primera calidad de la mano de profesores como Gerónimo Irala Burgos, Perla Colnago, Hugo Ferreira Gubetich y Gladys Heisecke. Por otro lado, destaca la tremenda amistad que logró forjar con varios de sus excompañeros con los que sigue manteniendo fuertes lazos cada vez que se encuentra con ellos durante sus visitas al Paraguay.
O aprendías la tabla de multiplicar o te comías un reglazo, y nadie se traumó por eso
José Gómez Vaesken
José Gómez Vaesken, otro integrante de la promoción 74, rememora sus anécdotas desde el preescolar. Relata que, en la calesita de la escuela, luego de dar un mal salto mientras esta estaba en movimiento, terminó lastimándose, debiendo acudir a la enfermería donde Julián, el encargado, tuvo que limpiarle sus rodillas peladas con una dosis de mercurocromo.
Ya en la escuela recuerda las clases de matemáticas de Evelia Gómez Serrato diciendo: “o aprendías la tabla de multiplicar o te comías un reglazo, y nadie se traumó por eso”. Más adelante en el tiempo, en cuarto grado, Vaezken menciona a las docentes Gladys Sánchez de Pereira y Teresa Correa, a quien apodaban la pequeña Lulu, sin dejar de lado al prefecto Padre Raúl Traversaro.
De la secundaria, los partidos de fútbol entre los cursos al sonar la campana de salida, la inevitable carrera baqueta para los cumpleañeros y los juegos en la cancha de básket del San José., aún siguen en su memoria.
“Creo que podríamos escribir un libro de anécdotas, pero es tan difícil hacer una síntesis con tantos recuerdos que llevamos en el alma”, señala.
Todo el colegio colaboró para que ese año sea una verdadera fiesta
Adolfo Giménez
Adolfo Giménez, quien fue presidente del Centro de Estudiantes por aquellos años recuerda los tiempos de su gestión: “una de las propuestas preeleccionarias de nuestra lista llamada “Naranja” fue la realización del gran encuentro de toda la familia del San José a través de un gran evento invitando a todos los colegios de la Congregación de los Padres Bayoneses, Betharram del cono sur”. En la ocasión se logró reunir a 200 estudiantes de lugares como Buenos Aires, Rosario, La Plata, Minas Gerais y Uruguay que confraternizaron en justas deportivas y culturales por el aniversario número 70 del colegio de San José, visitando además el campamento del colegio en San Bernardino. Rememora que los visitantes se pusieron tan contentos que posteriormente los invitaron al 75° aniversario del Colegio Sagrado Corazón de Rosario, Argentina.
Destacó que lo fundamental de aquella ocasión fue que a pesar de la competencia eleccionaria para el Centro de Estudiantes, ambos movimientos en puja se unieron ante la responsabilidad de un gran evento como era el 70° aniversario del colegio, además de otros encuentros internacionales, convenciendo a sus padres para que ese año sea una verdadera fiesta en el San José.
Giménez recuerda la predisposición de profesores guías como Joaquín Irún Grau, quien dio la idea del evento, Juan Manuel Marcos y Juan Francisco Crosa, por el gran trabajo en la coordinación de todo lo realizado y de dos personas: José Antonio Galeano, docente del colegio, y Ricardo Moreno Iribas en representación del alumnado. Además, fue importante la ayuda y apoyo de sacerdotes como el padre Villamor, director del colegio, el padre Antonio Cano y el padre Joaquín Chivite. No olvida tampoco el apoyo de su vicepresidente del Centro, Guillermo Benítez Colnago y destaca el trabajo de los estudiantes del bachillerato quienes “hicieron posible todo lo que vivimos y disfrutamos”.
Siempre tratamos de mantener el contacto con los excompañeros de la promoción
José Fleitas
Además, siente un gran agradecimiento hacia sus compañeros, quienes lo eligieron a él como Mejor Compañero del A. Recuerda que por el B fue elegido su querido compañero José Antonio Lima.
Las actividades deportivas que le tocó participar como parte importante de su paso por el colegio, participando en la selección de fútbol asi como de otros deportes también son parte de las anécdotas.
Destacó que lo aprendido durante su paso por el San José son enseñanzas que le han servido en los desafíos que la vida le ha dado en medio de errores y aciertos. Afirma que haber formado parte del colegio es un orgullo y eso le hace sentir muy unido a sus excompañeros
