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Edición N° 5
Vivimos nuestro presente cada día más alocadamente y nos preocupa de sobremanera nuestro futuro. Pero cuando hacemos memoria de nuestro pasado, lo que vivimos, las personas queridas, lo que realizamos, sentimos realmente lo que fuimos, lo que somos y lo que seremos.
Hoy me gustaría en estas líneas rememorar el pasado, lo que el Colegio San José en sus 115 años de historia que celebra nos ha dado.
El Colegio de San José como una institución educativa nos dio en primer lugar formación académica. Podemos mencionar aquí a muchísimos grandes hombres, y hoy también grandes mujeres, que han salido y se han destacado en diversos roles dentro de nuestra sociedad, aportando significativos méritos.
Como institución religiosa también nos ha dado una formación moral, donde muchos han entendido la importancia de los valores como principios de conducción. Además, dentro de las promociones se han formado amistades que duran años, décadas. Siempre son mencionados por todos y cada uno de los exalumnos: ¡la amistad, la tolerancia y la ayuda!
Pero no podemos vivir del pasado sin que soñemos y trabajemos para que las generaciones que van viviendo su presente hoy en el San José entiendan y valoren cosas fundamentales, como que no están en un colegio más. Están viviendo, aprendiendo y siguiendo la línea del lugar donde grandes personalidades se han formado, un lugar donde en la historia de nuestro país ha tenido participación y preponderancia esta centenaria casa. De la misma manera, ojalá podamos ver siempre que muchos más sanjosianos se destacan en aportes positivos, en gestiones honestas, en la conducción de un país mejor.
